img fondo

¿Por qué el coyote no atrapaba al correcaminos?

Que creativo era el coyote para intentar atrapar al correcaminos, quien siempre lograba escapar de las trampas más ingeniosas y rebuscadas que podía inventar su captor.

Era innegable que el nivel de preparación del coyote era muy bueno, siempre con planos de detallamiento, esquemas, procedimientos, EETT e incluso con pruebas de terreno antes de ejecutar una trampa. Sin embargo, aun así, siempre fallaba.

Pero ¿cuál era la razón de fondo en sus desaciertos?, porque se veía que utilizaba tecnología muy avanzada para esa época (principios de los 50’s). ¿podría atribuirse a que simplemente tenía mala suerte?

Veamos si hay alguna similitud con lo que nos pasa en construcción, donde muchas veces perseguimos los correcaminos de la programación, los costos o la calidad de los proyectos, que se nos escapan de las manos, sobre todo al intentar conseguirlas en conjunto.

¿Será que las obras son más rápidas que nuestra tecnología, o que no entendemos la información que se desarrolla desde el diseño, la construcción y hasta su operación?

Una causa fundamental es que aplicamos tecnología sin entenderla. Por ejemplo, muchos están adoptando softwares de digitalización, pero los usuarios finales se sienten como el coyote, arriba de un cohete que los puede catapultar incluso más rápido que el correcaminos, pero finalmente explotando antes de alcanzar su objetivo. Y esto, porque no damos importancia a la etapa de implementación de la tecnología en el proceso de transformación digital, que debe ser antes que todo, cultural.

Y lo anterior no sólo sucede a nivel operativo, sino que a todo nivel profesional. Por ejemplo, uno de los grandes problemas apunta a la “Ingeniería Estructural Automatizada”, respecto de la baja “interoperabilidad” o capacidad de los sistemas de información, y de los procedimientos a los que éstos dan soporte, de compartir datos y posibilitar el intercambio de información y conocimiento entre ellos. Ya que cada etapa del eslabón de diseño desarrolla su modelo en su propio software, desperdiciando mucha data entre los modelos de arquitectura vs el estructural vs el de fabricación vs el de construcción, y finalmente, el de monitoreo operacional.

En definitiva, es como si el diseño, construcción y operación, fueran desarrollos con marca ACME 1.0, sin aprovechar de buena forma la innovación tecnológica que propicia la industria 4.0, que sinergiza tanto la digitalización con la industrialización automatizada, que de seguro le permitiría al coyote en estos tiempos alcanzar sus objetivos, y al correcaminos no sólo depender de su velocidad para continuar con los propios.

Y tú, ¿cómo te identificas? ¿aplicando tecnología como el coyote, arrancando de ella como el correcaminos, o preparándote para el futuro de la construcción digitalizada e industrializada ACME 4.0?


Por Rodrigo Reyes 

CEO Durability